Recientemente, por fin tuvimos la oportunidad de realizar una ansiada jornada de urbex, ya que la meteorología, los compromisos y las enfermedades, nos habían hecho imposible llevarla a cabo antes.
En compañía de unos amigos, decidimos desplazarnos hasta un lugar que ya estaba un tiempo en la lista de enclaves pendientes por visitar. Se trata de un emplazamiento militar histórico, levantado en plena montaña, y arropado por el puerto de una ciudad murciana. Actualmente, se encuentra varios años en abandono, lo que ha traído como consecuencia un severo expolio y vandalismo por parte de irrespetuosos visitantes.
Este impresionante edificio, carga con una larga historia a sus espaldas, y no son pocos los acontecimientos bélicos, que han tenido lugar en él, ya que siempre ha sido un importante punto naval estratégico. Su construcción, data del siglo XIX. Construída con un sólido mortero y roca pura, su forma es rectangular, y consta de un amplio patio interior. Posee dos caponeras curvas en las esquinas opuestas, dotada de parapetos y aperturas para sacar las armas. Consta de 2 plantas y un sótano.
El interior del edificio, estaba acondicionado para albergar a un gran número de soldados, por lo que cuenta con amplias habitaciones, en las que se encontraban los barracones, además de algunas salas destinadas a albergar a las tropas y altos mandos. La fortaleza, tenía cafetería, comedor, cocinas, barbería, capilla, y un gran número de salas que cumplían las necesidades exigidas por un acuartelamiento militar de estas características.
El interior de este emplazamiento, recuerda mucho a cómo debían ser los castillos de la antigüedad. La entrada, consta de un gran portón con fusileras para sacar los cañones de las armas.
Las estancias, son de altos techos abovedados, y el gran espesor de los muros, provoca que la temperatura en el interior sea siempre más fresca.
Las habitaciones son grandes, con amplias ventanas, y totalmente simétricas, diseñadas para albergar a un gran número de soldados.
Un edificio cargado de historia y de un singular atractivo que invita, y mucho, a volver a visitarlo cuando sea posible. Esperamos que este pequeño recorrido por él, a través de las fotografías, haya sido de su agrado.
Cordiales saludos.
Oniria Misterio
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